ATLANTA (WFLA) — Los Tampa Bay Buccaneers llegan con buen ritmo al choque del jueves por la noche de la NFC Sur con los Atlanta Falcons, pero hasta ahora, la semana de juego corta ha presentado muchos desafíos.
El informe de lesiones de la práctica del martes incluyó a 15 jugadores, ocho de ellos titulares. Tres de los cinco linieros ofensivos titulares están lesionados.
El tackle derecho Luke Goedeke se perderá un cuarto juego consecutivo y permanecerá en el protocolo de conmociones cerebrales.
El liniero defensivo Calijah Kancey aún no ha ingresado al campo esta temporada, recuperándose de una lesión en la pantorrilla, mientras que el safety Antoine Winfield Jr. continúa lidiando con la lesión en el pie que sufrió en la Semana Uno.
Sin embargo, los Bucs no son ajenos a la incorporación de suplentes a la alineación. Ni la línea defensiva ni el backfield defensivo han utilizado a todos sus titulares habituales en cuatro partidos, y el partido del jueves no será diferente.
La semana pasada, el equipo llegó cojeando a su partido contra los Philadelphia Eagles y dominó todo el juego, logrando una victoria de 33-16 para mejorar a 3-1 en la temporada.
El mariscal de campo Baker Mayfield agregó a su total de pases de touchdown de la temporada, que ahora es ocho, y también corrió para un touchdown.
Los Bucs esperan seguir progresando en la ofensiva. Anotaron touchdowns en series consecutivas al comienzo del partido, un problema que se remonta a la temporada pasada.
Los corredores Rachaad White y Bucky Irving siguen siendo la combinación que el coordinador ofensivo Liam Coen quiere ampliar, incluso cuando Irving parece estar emergiendo como el portador del balón más efectivo. El novato ya ha logrado dos carreras de más de 30 yardas y es escurridizo, el complemento perfecto para la habilidad de White para romper tacleadas.
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El regreso más notable en la victoria de la semana pasada fue el del liniero defensivo Vita Vea, quien regresó después de perderse solo un juego por un esguince de ligamento medial colateral.
El dominio de Vea en el interior contra los Eagles ayudó a llevar a la defensa a un récord de temporada de seis capturas de mariscal de campo, un elemento del juego que faltó en los primeros tres juegos de la temporada.